∃SPÉCIE es la performatización de un devenir animal a través de un cuerpo en continuos estados de metamorfosis y transustanciación; una invitación íntima e intransferible a sumergirse en la oscuridad silenciosa de un pasado oceánico; una experiencia inevitable e irreversible de transformación de la mirada del observador.

∃SPÉCIE no se refiere a lo identificable, sino a lo que nos pertenece y que no conocemos. Alude a lo improbable del momento en que lo visible se toca, se cruza y se funde con lo invisible.

Su dramaturgia se estructura mediante sustracciones, la experiencia estética se instala como un desafío. Su primer movimiento es el de la oscuridad que invade los espacios del ojo del espectador, una invitación al buceo y la inmersión en un territorio de los posibles.

En busca de otras formas de ver, de vivir las ausencias como campos de conocimiento aún por reconocer y, a través de ellas, intentar practicar algún silencio como una charla colectiva. impredeciblemente, encendemos el destello que brota de este encuentro íntimo y en vivo, con un cuerpo en continuos estados de transformación y metamorfosis, en sucesivos actos de abandono, de construcción y derrumbe, de aparición y desaparición.

Encuentro con un cuerpo abierto que escapa a acomodaciones identitarias y significados pero crea un universo donde se encarnan y se hacen presentes imágenes como el animal, la mujer y el anciano, y entre otras, se barajan como un carrusel, en un trayecto difuso, un fluir que traspasa las miradas en la duración precisa del acto de investigación del cuerpo del perfomer, por el propio cuerpo del performer. cuerpo que, al transitar por estados sensoriales-perceptivos, demuestra su capacidad única y singular de transustanciación de sus materialidades, de exteriorizar los líquidos de dentro en acciones – saliva, sudor y lágrimas.