El proyecto se basa en la búsqueda de un formato escénico cercano a un concierto, pero con énfasis en el cuerpo y su movimiento como creador del sonido. La innovación surge en un formato híbrido realizado en un directo de música y movimiento, entendiendo que ambos pueden ser provocados por la misma acción. La idea principal es que el cuerpo sea el ejecutor de movimientos que configuran el espacio sonoro. Manipular la repercusión de espacio y sonidos a través de la grabación y sintetización instantánea del sonido. Básicamente esta fase se centra en la búsqueda de materiales generados mediante la digitalización y transformación de los movimientos o coreografía.

Las referencias iniciales de formato fluctúan entre un concierto de trap, un set de música experimental y una propuesta de danza española con música en directo.